Arquitectos: Smart Ubicación: Rua Amélia Teles 315, Porto Alegre, RS, Brasil Equipo: Ricardo Vellinho Ruschel, architect – author, Márcio Carvalho, architect – co-author, Carlos Eduardo Voegeli, civil engineer – co-author. Andressa Venturini and Matheus Silveira, INTERNS Estructura: Paulo Stumm Iluminación: Eduardo Becker Constructor: Carlos Lopes Año Proyecto: 2010 Fotografías: André Cavalheiro
Vivimos en un momento del tiempo, donde la búsqueda creciente de auto-expresión, la independencia y la libertad de elección son una parte importante de una nueva identidad urbana en varias formas de expresión cultural. El Edificio Amélia Teles 315 fue creado con estas premisas en mente, casi como una apuesta a que estas percepciones contemporáneas de identidad también se pueden encontrar en y facilitadas por la arquitectura. El objetivo principal del proyecto fue explorar el diálogo entre la vida privada y la urbana, especialmente teniendo en cuenta que este diálogo ha sido olvidado por la mayoría de los promotores inmobiliarios y arquitectos en Brasil al mirar la violencia en las ciudades desarrolladas.
En el ámbito privado las relaciones de identidad se refuerzan a través de un departamento de planta abierta artesonado de losas de hormigón sin vigas empotradas, por lo tanto es totalmente personalizable y adaptable a la forma de vida de sus residentes. En el ámbito urbano, tenemos un objeto arquitectónico que refuerza el respeto a la escala humana, integrado a su entorno en una ciudad, en el centro de un barrio alegre y cosmopolita, donde algunas de las atracciones principales de la ciudad se pueden encontrar a pocos pasos.
La Arquitectura
Nuestro objetivo era crear un edificio, al mismo tiempo simple y sólido, neutral y sin tiempo. Una arquitectura generada por las líneas simples y puras que dialogaron con los vecinos de una manera positiva, sin suntuosidad u ostentación, integrándose a sí mismo e interactuando con la calle.
De alguna manera se utilizaron los mismos elementos conceptuales que formaban parte de la arquitectura residencial en los últimos años 50 y 60 en Porto Alegre, pero bajo un punto de vista contemporáneo. El edificio consta de 8 departamentos, que van de 102 a 127 metros cuadrados, así como 12 plazas de estacionamientos a lo largo de sus 5 pisos, alcanzando un área total de construcción de 1190 metros cuadrados.
La mayoría de los departamentos eligieron la configuración de un dormitorio, ya sea integrado o semi-integrado a la sala de estar. Uno de los elementos más expresivos de la vivienda es la ventana principal que se extiende por 9,40 metros de ancho y se abre 2/3 de su longitud, lo que permite la apropiación completa de las vistas de los alrededores.
Aspectos Técnicos
En todo el edificio se utilizaron ventanas de PVC de alto rendimiento de doble acristalamiento. Todos los departamentos cuentan con aislamiento acústico debajo del suelo y a lo largo del sistema de tuberías del alcantarillado. El sistema de calefacción fue proporcionado en los cuartos de baño y un sistema de automatización central controla todo el alumbrado y tomas de corriente.
Como parte de las instalaciones técnicas queríamos tener, además de los efectos estéticos de los materiales utilizados, una necesidad muy baja de mantenimiento en el futuro y una alta durabilidad. Los muros exteriores se terminaron con baldosas de vidrio y en las zonas comunes se utilizaron sólo accesorios de iluminación LED. Las losas de la azotea se cubren con un techo verde y todo el paisaje se ha diseñado con especies nativas de necesidades de mantenimiento y riego muy bajos.
En la azotea, además de ser un área técnica que concentra los sistemas de almacenamiento de agua, seguridad, automatización y ascensor, es accesible para los residentes. Una adaptación brasileña de las azoteas famosas de Nueva York.
